Tanto se separó la Iglesia que el Estado abrazó a Lemanjá


Autor: Horacio Giusto Vaudagna

El día 2 de febrero centenares de personas llegaron a la costa argentina con ofrendas para depositarlas en el mar y así realizar pedidos a la deidad “lemanjá”. Dicha festividad posee su origen en la cultura africana de la cual emerge la religión animista traída por esclavos del tercer continente más extenso del mundo. Lo que cada año se celebra, bajo la anuencia cultural modernista de la libertad religiosa, merece esta vez una especial consideración. Suele suceder que muchos confundan el origen del culto a la “diosa del mar”, especialmente por coincidir la fecha del 2 de febrero con la celebración católica de la Virgen de la Candelaria. Lo real es que la denominada diosa del mar, Lemanjá, proviene remite a una entidad espiritual originaria de la religión africana yoruba[i] y su culto se enrola en las prácticas religiosas de la macumba. Sin entrar en el plano sobrenatural, la macumba es aquel conjunto de ritos que se extiende desde Brasil hacia el resto de América y posee elementos de diversas religiones. Los máximos exponentes de la macumba son los umbandas, facción que posee un negro haber de rituales y sacrificios[ii].
A pesar de que incluso se pudo probar que los umbandas han sacrificados niños[iii], lo llamativo de este nuevo festejo que se vuelve recurrente año tras año en las costas latinas, es la presencia del INADI. El Instituto Nacional contra la Discriminación dirigido por la hija de terroristas, Victoria Donda, se hizo presente en la fiesta de Iemanjá. Tal como informa el medio periodísitico “El Popular”, “En Mar del Plata, el INADI participó de la 36° Fiesta del Mar, en homenaje a la Mae Iemanjá, deidad de las religiones de matriz afro y patrimonio de la identidad afrodescendiente y de la cultura argentina”. A esto se le suma las declaraciones de la titular del INADI, que dijo: “Reivindico la conmemoración de Iemanjá como símbolo de lucha inquebrantable del pueblo esclavizado/a, alejado de su tierra, con la esperanza de desarticular ese manto de prejuicios que recae sobre las religiones de matriz afro”.
Lo que parece una noticia sin la más mínima trascendencia, es en verdad un motivo de reflexión. Tanto liberales como comunistas bregaron por la lucha cultural de separar la Iglesia del Estado; muchos en forma ingenua creyendo que se trataba de una simple discusión presupuestaria donde en rigor de verdad, los montos eran ínfimos. La batalla real era de índole moral; separar la Iglesia del Estado era promover un campo libre de todo vestigio de moral y tradición que impidera ingresar lo más ruin del progresismo internacional. Muchos que apoyaron tal separación verán ahora, en forma concreta, cómo el campo cultural se allanó para que desde el Estado “laico” se imponga restricciones a la Vida, la Libertad y la Propiedad.
La misma gente que repudió la Fe dentro del escenario político, es la que ahora usa el poder político para abrazar cultos que reivindican el sacrificio humano. En este sentido, quizás no sea tarde para que algún lector de buena fe comprenda que, siendo hegemónica la opinión progresista, la lucha por separar la Iglesia del Estado en nada iba a favorecer a los demás cultos cristianos. Lo que comenzó siendo una disputa cultural para allanar el debate para legalizar el aborto, ahora muestra las extensiones de sus repercusiones y cómo paulatinamente el Estado intenta aniquilar todo vestigio de la tradición que forjó este país.


[i] Según amplía el medio Aleteia: “Los esclavos traídos de África al Brasil durante la época colonial eran insertados en una cultura fundamentalmente europea, donde tuvieron grandes dificultades para mantener vivas sus tradiciones, costumbres y creencias religiosas. Sus creencias sobrevivieron entremezcladas con elementos de origen indígena y disimuladas bajo el ropaje de las imágenes de santos católicos, de la Virgen María y de Jesús. Con el tiempo también influyó el espiritismo en la doctrina y prácticas de estos cultos dándole un carácter más esotérico. Por esta razón vemos en sus ritos y creencias elementos de diverso origen: africano, católico, indígena y espiritista”.
[ii] Veáse como ejemplo:
El caso del pai umbanda Ramón, acusado de violar a sus nietas con la ayuda de su hija: quería “quitarles los malos espíritus”; https://www.infobae.com/sociedad/policiales/2019/11/29/el-caso-del-pai-umbanda-ramon-acusado-de-violar-a-sus-nietas-con-la-ayuda-de-su-hija-queria-quitarles-los-malos-espiritus/
Brujería, rituales, magia negra y el uso de cadáveres de niños; https://www.lacapitalmdp.com/brujeria-rituales-magia-negra-y-el-uso-de-cadaveres-de-ninos/
[iii] Tortura y sacrificio humano en rito umbanda, la historia detrás del juicio; https://www.lacapitalmdp.com/tortura-y-sacrificio-humano-en-rito-umbanda-la-historia-detras-del-juicio/

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